Más 25 millones de puestos de trabajo podrían desaparecer por el COVID-19
El brote del nuevo coronavirus podría provocar la destrucción de más 25 millones de puestos de trabajo en todo el mundo y generar pérdidas de 3,4 billones de dólares de ingresos de los trabajadores este año, declaró la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
«Sin embargo, si vemos una respuesta política coordinada a nivel internacional, como ocurrió durante la crisis financiera de 2008-2009, entonces el impacto en el desempleo global podría ser significativamente menor», afirmó la entidad.
La OIT no solo advierte del aumento del desempleo. También del peligro que supone que en estas circunstancias aumente el subempleo, uno de los enemigos contra los que esta organización advierte normalmente y ahora con más motivos. Los colectivos que están más expuestos son los que ya están en peores circunstancias y peor han salido de la crisis anterior: jóvenes, mujeres, trabajadores de más edad y los empleados que no tienen protección social (falsos autónomos, trabajadores precarios de la nueva economía digital) e inmigrantes.
El análisis rápido que hace la OIT apunta a que la pérdida de ingresos laborales podría llegar a ser 860.000 millones de dólares en el mejor de los casos y de 3,4 billones en el peor. “Esto se traducirá en caída del consumo de bienes y servicios, lo que irá en detrimento de la continuidad de los negocios”, apunta .