Castañer prosigue su reestructuración: reduce capital en cuatro millones para compensar pérdidas
Castañer prosigue su reorganización. La sociedad Espadrilles Banyoles, matriz de la compañía de calzado, ha acometido una reducción de capital de 4,4 millones de euros, según consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil. Tras la operación, el resultante suscrito de la sociedad es de apenas 22.000 euros. Desde el grupo explican que se debe a un “ajuste contable”.
En el consejo convocado el 22 de junio se aprobó por unanimidad convocar una junta extraordinaria de accionistas que incluía en el orden del día “una reducción de capital social para compensar pérdidas”. En sus últimas cuentas anuales, correspondientes al ejercicio 2018, la empresa explica que el consejo tomó esta decisión “para evitar que la sociedad se viera incursa en causa de disolución”.
Castañer llevó a cabo la reducción para evitar incurrir en causa de disolución
La empresa explica, asimismo, que debido a las “dificultades surgidas con los sistemas informáticos”, ya subsanadas, no se pudo formular un balance cerrado a 31 de mayo de 2018, dado que se cerró con posterioridad al plazo de seis meses que es el plazo que la ley exige para que el balance sea aportado a la reducción de capital social.
La compañía lleva años inmersa en una profunda reestructuración. En 2017, Castañer refinanció su deuda con las entidades bancarias, que entonces ascendía a 10,4 millones de euros con vencimiento a corto plazo. El acuerdo, que se hizo efectivo al año siguiente, incluyó una inyección de 1,05 millones de euros por parte de los accionistas de la compañía.
Ocho de las diez entidades bancarias acreedoras de Castañer aprobaron la refinanciación. En abril de este año, la Audiencia Provincial de Girona arrastró a las otras dos entidades que no habían firmado a adherirse al acuerdo, finalizando así el proceso de refinanciación.
La Audiencia Provincial de Girona obligó a las dos entidades no firmantes a sumarse al acuerdo de refinanciación
Aquella fue una de las primeras tareas de Rafael Calvo, que se incorporó ese mismo año a la empresa como director general. Sin embargo, apenas dos años después Castañer decidió relevarlo y fichó a Daniel Vancells, exconsultor en Kpmg y experto en reestructuraciones, como nuevo primer ejecutivo.
Según las últimas cuentas consolidadas depositadas en el Registro Mercantil, Castañer cerró el ejercicio 2018 (finalizado el 31 de julio) con una facturación de 21,6 millones de euros, frente a los 17,4 millones del año anterior. La empresa redujo sus pérdidas hasta 820.630 euros, un 80% menos que el año anterior.