Ángel Asensio (Moda España): “La situación actual es como una guerra sin tiros”
Ángel Asensio está al frente de la Confederación de Empresas de la Moda de España (Moda España). El empresario, que preside también la Cámara de Comercio de Madrid y lidera la compañía Kiff Kiff, opina que el Gobierno debería tomar medidas para el empleo, fiscales y financieras para paliar no sólo la situación actual, sino también el día después. “Esto es una guerra sin tiros, pero después viene la posguerra y eso supone una travesía en el desierto”.
Pregunta: ¿Cómo está viviendo el sector estos primeros días de estado de alarma?
Respuesta: Con muchísima incertidumbre. Es una situación anómala que nos supera a todos. Las perspectivas son entre malas y muy malas.
P.: ¿Qué herramientas tienen las empresas para paliar esta crisis?
R.: De momento no tienen herramientas para una situación como esta porque es una causa de fuerza mayor, por lo que no pueden acogerse a medidas estándar como los Ertes. Lo que se está pidiendo es que, al ser medidas excepcionales para una situación de absoluta emergencia, la tramitación sea mucho más rápida. En un sector intensivo en mano de obra, evidentemente uno de los mayores pesos de nuestra cuenta de resultados es el empleo. Si no se puede tomar una medida excepcional vamos a tener un problema mucho más grave, que es la desaparición de empresas. Y eso es como un bosque quemado, tarda muchísimos años en recuperarse.
P.: ¿La legislación actual sobre Ertes no está preparada para esta situación?
R.: Ahora mismo no. Es una situación sobrevenida, con unas circunstancias excepcionales. Normalmente tienes que tener la aprobación del personal, unas causas concretas y un proceso. Hay que crear unas leyes para una situación de emergencia nacional, especialmente para hacerlo con la rapidez que se requiere.
“Después vendrá la posguerra, y eso supone una travesía en el desierto”
P.: ¿Qué medidas concretas le propondría al Gobierno?
R.: En primer lugar, ha sido una circunstancia sobrevenida, por lo tanto la resolución positiva ha de ser inmediata. Y, en segundo lugar, no se sabe cuál será la durabilidad. No es como cuando a una empresa le caen las ventas, que hay un plan estratégico de salida en base al cual se aplica el Erte. Aquí no hay información.
P.: ¿Qué otras medidas se pueden tomar?
R.: La segunda es en materia fiscal. Los impuestos son una consecuencia de la actividad económica de las empresas y de las personas. La actividad económica para una parte importantísima de todos los operadores económicos, autónomos, pymes y grandes empresas está desaparecida en estos días. Esa parte que le corresponde de impuestos tampoco existe. Tenemos que adaptarnos todos a esta nueva situación: se ha creado un agujero y tenemos que cubrirlo entre todos.
P.: Se ha adelantado ya que se aplazaría el pago del IVA y Seguridad Social. ¿No es suficiente?
R.: Aplazar el IVA y la Seguridad Social siete meses es pan para hoy y hambre para mañana. Venimos de una crisis y desde entonces las empresas están en una situación de supervivencia, con márgenes estrechos y condiciones de mercado más difíciles. Si tienes las defensas muy bajas, económicamente hablando, eres mucho más débil ante cualquier enfermedad. Pero es que esto es un tsunami, por lo que tenemos que tener medidas a la altura. Hay que condonar parte de los impuestos y dar facilidades de pago para el resto.
“Si no se puede tomar una medida excepcional vamos a tener un problema mucho más grave, que es la desaparición de empresas”
P.: Empleo, fiscal… ¿Hay alguna medida más que se pueda adoptar?
R.: Financiera. Alemania lo ha hecho muy bien, con un aval ilimitado para las pymes. Tenemos que hacer lo mismo. Para que esto funcione con cierta celeridad el Gobierno, respaldado por el Banco Central Europeo, deben dar un aval a los bancos para que estos, con sus clientes, puedan conceder préstamos sin más demora y avalados por el Gobierno y el BCE. Esto sería una política fiscal expansiva, que permitiría a la larga estimular el consumo y recaudar luego más impuestos.
P.: ¿Qué horizonte temporal contemplan?
R.: Incertidumbre absoluta. Lo que se trata es de bajar la curva. ¿Cuándo bajará? Ni los expertos lo saben. Por eso estamos en la situación en la que estamos, para evitar ese colapso sanitario.
P.: ¿Cómo se imagina el primer día de regreso a la normalidad?
R.: Esto es una guerra sin tiros, pero después viene la posguerra. Y eso supone una travesía en el desierto. Si hay buenas decisiones que alivien a las empresas para mantener el empleo y el consumo sería más liviano que si no se toman decisiones valientes e importantes para que esto se reactive.