Under Armour cambia al director de operaciones y crea la dirección de experiencia
Under Armour reconfigura su comité de dirección. La marca de artículos deportivos ha ascendido a la dirección de operaciones a Colin Browne, que desde 2017 era responsable de la cadena de suministros, y ha entregadon la recién creada dirección de experiencias a Paul Fipps, que hasta ahora llevaba el área digital. Ambos reportarán a Patrik Frisk, que en octubre de 2019 pasó de operaciones a asumir la dirección general de la multinacional.
Browne entró en la compañía en 2016 y 2017 ya se hizo cargo de la cadena de suministro, lo que incluía todas las operaciones globales relacionadas con el abastecimiento de productos y la logística. Ahora también tendrá bajo su mando la planificación de la demanda, distribución, tecnología de la información, gestión de procesos comerciales, inmobiliario, protección de activos y sostenibilidad. “Está calificado de manera única para impulsar una mayor priorización estratégica, productividad y responsabilidad dentro de Under Armour”, señala la compañía sobre él, que antes trabajo en otros grupos de moda como VF Corporation, Li & Fung y Reebok, entre otros.
Fipps, por su parte, deberá definir la experiencia global del consumidor y la estrategia digital de la compañía, incluyendo todo el negocio a través del comercio electrónico y su plataforma Connected Fitness, así como el desarrollo de software, la gestión de relaciones con los clientes y el big data. Es algo que ya conoce, pues desde 2018 era el director digital, tras un año al frente del área TIC y tres más al frente de las operaciones globales. “Subraya nuestro deseo de unificar, elevar y aprovechar verdaderamente el poder y la intersección del producto, la marca y la experiencia”, ha indicado Frisk.
Under Armour cerró los nueve primeros meses de 2019 con una facturación de 3.825,9 millones de dólares (3.426 millones de euros), un crecimiento de apenas 0,5% respecto al año anterior. El beneficio, por su parte, aumentó hasta 107,4 millones de dólares (96 millones de euros). Se trata de un salto notable, pues entre enero y septiembre de 2018 la compañía obtuvo unas pérdidas de 50 millones de dólares, aunque actualmente está siendo investigado por la Comisión del Mercado de Valores (SEC) y el Departamento de Justicia (DoJ) de EEUU